Esta región abierta y de amplios y claros cielos, puede ser gratificante para los amantes del campo y del aire libre. Los paisajes son agrestes y desnudos; aunque sean áridos tienen su vegetación y sus escondidos manantiales. Se trata de unos campos llenos de escarpaduras, pero surcados también por pequeñas vegas donde se alzan cortijos blancos rodeados de espartos, retamas y chumberas.