Añibarri es un caserío restaurado que ofrece 2 viviendas, una tiene capacidad para doce personas y la otra para 6. Asimismo, alberga frontón y derecho a cocina. Para que se relaje hay una estupenda piscina. Los más deportistas tendrán a su disposición una pista de tenis. Está enclavado en una finca de 1 hectárea.
Casa/día 140-210 €
Txopebenta es un caserío con 100 años de antigüedad que ha sido restaurado con materiales de desecho, como las antiguas traviesas de las vías ferroviarias. Ofrece un alojamiento con encanto especial y...
Caserío Iruaritz Baserria: se trata de una casa de campo levantada sobre los restos de un caserío datado al siglo XV. Los clientes tienen a su disposición un bar privado, cuartos de baño con secador, ...